Bonito y Machu Picchu: El poder de los gemelos Sitios designados por la UNESCO Acción climática pionera en el turismo
En una época en la que el cambio climático plantea desafíos importantes para nuestro planeta, la industria del turismo está intensificando sus esfuerzos para desempeñar un papel crucial en la mitigación de su impacto a través de la Declaración de Glasgow para la Acción Climática en el TurismoEn este contexto, dos destinos culturales y ecoturísticos emblemáticos están liderando el camino de la acción climática en el turismo. Bonito, ubicada en el Pantanal brasileño y reconocida como Reserva de la Biosfera de la UNESCOsueñoy Machu Picchu, situada en los Andes peruanos y reconocida como una USitio mixto de patrimonio mundial de NESCO, integrar las mejores prácticas de mitigación del cambio climático en sus modelos de desarrollo turístico.
Los resultados alcanzados hasta ahora, a través de la certificación climática de ambos destinos, han demostrado consistentemente que mediante una acción bien informada y pragmática, el desarrollo del turismo en las Reservas de la Biosfera de la UNESCO y los Sitios Mixtos de Patrimonio Mundial puede ir de la mano con la descarbonización de los destinos turísticos, generando impactos positivos tanto en la economía local como en el clima.
Bonito y Machu Picchu: laboratorios para la acción frente al cambio climático y el desarrollo de conocimientos
Bonito, ubicada en Mato Grosso do Sul, Brasil, fue designada Reserva de la Biosfera por la UNESCO en el año 2000. Bonito ha sido durante mucho tiempo un referente para el turismo sostenible, conocido por sus ríos de aguas cristalinas, sus impresionantes cascadas y su rica biodiversidad. De manera similar, Machu Picchu, la antigua ciudadela inca enclavada en la Cordillera de los Andes del Perú, fue declarada Patrimonio de la Humanidad Mixto por la UNESCO en 1983.
En colaboración con el Green InitiativeAmbos destinos de la UNESCO, Bonito y Machu Picchu, se han embarcado en un viaje transformador hacia emisiones netas cero a través de un riguroso proceso de certificación climática que implica:
- Medición del balance de emisiones de carbono y captura de carbono;
- Restaurar ecosistemas para la recuperación del hábitat de la vida silvestre y la creación de oportunidades de ingresos verdes para las comunidades locales;
- Ejecutar acciones concretas de mitigación del cambio climático con impacto directo en la reducción de emisiones de carbono y aumentar la conciencia de la comunidad sobre la economía circular y la mitigación del cambio climático;
- Compensar las emisiones de carbono restantes como parte de un plan estratégico de descarbonización.
En 2021, el destino turístico de Bonito tuvo un total de 17,829.42 tCO2eq de emisiones. Alrededor del 51% de su huella estuvo relacionada con el consumo de combustibles por fuentes móviles terrestres, como automóviles y autobuses utilizados por los turistas en sus visitas. La segunda mayor emisión fue la descomposición de residuos sólidos (22.32%), seguida del consumo de electricidad (6.02%). En el desarrollo del Plan de Acción Climática de Bonito, se definieron varias acciones para abordar estas emisiones fundamentales, como estimular el uso de biocombustibles, la conversión y disponibilidad de vehículos eléctricos, mejoras en la gestión de residuos en el sistema público, participación de la comunidad en la economía circular y mejoras en la captura de carbono mediante la promoción de restauraciones de ecosistemas.
Por otro lado, en 2022, Machu Picchu logró reducir sus emisiones a 7,117.55 tCO2eq, una disminución del 18.77% respecto al año base 2019. Se implementaron cuatro procesos para reutilizar los residuos valorizables:
- Planta compactadora de plástico PET y cartón.
- Una planta de biodiesel para procesar aceites usados de restaurantes.
- Una planta de pirólisis de residuos orgánicos que genera biocarbón que los agricultores locales utilizan como sustituto de fertilizantes nitrogenados.
- Dos trituradoras de vidrio para convertir botellas en arena para construcción y ornamentación.
Además, se introdujeron vehículos eléctricos para el transporte de los residuos generados y se establecieron puntos de segregación de residuos en todo el distrito, entre otras acciones. Los nuevos procesos de gestión de residuos redujeron significativamente 40.80 tCO2eq, 2.5 veces más que en 2019. La captura de carbono de la restauración ecológica, donde se plantaron 6,596 árboles nativos en áreas degradadas, capturando 5,055.17 tCO2eq, supuso un balance neto de emisiones de 2,062.38 tCO2eq. La huella de carbono de Machu Picchu ha sido compensada íntegramente con 2,155 créditos de carbono del proyecto REDD+ Concesiones de Castaña de Brasil de Bosques Amazónicos (BAM), que protege más de 600,000 hectáreas de bosques megadiversos y apoya a más de 800 familias recolectoras de castaña de Brasil en Madre de Dios, Perú.
Al integrar la acción climática en sus modelos de negocio básicos, estos destinos están estableciendo nuevos estándares para el turismo sostenible en los sitios declarados patrimonio de la UNESCO. Jose Salazar Ríos, Coordinadora del Sector de Cultura de la UNESCO Perú, reflejos:
"Machu Picchu, uno de los 13 sitios de Patrimonio Mundial que tiene el Perú, es un ejemplo inspirador de cómo el turismo puede integrarse con la acción climática, contribuyendo así a la sostenibilidad y conservación del Patrimonio Mundial."

Declaración de Glasgow sobre la acción climática en el turismo
La Declaración de Glasgow sobre la Acción Climática en el Turismo es un marco fundamental para movilizar al sector turístico a fin de que actúe con decisión frente al cambio climático. La Declaración, presentada en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26) celebrada en Glasgow, compromete a los signatarios a reducir a la mitad las emisiones para 2030 y a alcanzar el objetivo de cero emisiones netas para 2050 a más tardar. Al alinearse con las vías de acceso al Acuerdo de París, la Declaración proporciona una hoja de ruta clara para que los actores del turismo integren la acción climática en sus modelos de negocio.

La Declaración de Glasgow fomenta la colaboración en toda la industria y promueve el intercambio de mejores prácticas, recursos y soluciones innovadoras para acelerar la descarbonización. Bonito y Machu Picchu son participantes ejemplares de este movimiento global, que demuestra cómo los sitios declarados patrimonio de la UNESCO pueden dar ejemplo al integrar estrategias climáticas integrales en sus operaciones turísticas. A través de iniciativas como estas, la Declaración de Glasgow tiene como objetivo unificar a la industria del turismo en la lucha contra el cambio climático, fomentando un esfuerzo colectivo para proteger nuestro planeta para las generaciones futuras.
El poder de los dos sitios designados por la UNESCO para la mitigación del cambio climático
La colaboración entre Bonito y Machu Picchu, como ciudades gemelas climáticamente inteligentes, tiene un inmenso potencial para la mitigación del cambio climático y el desarrollo de conocimientos en todo el mundo. Al compartir las mejores prácticas, los recursos y las soluciones innovadoras, pueden ampliar su impacto en la reducción de las emisiones relacionadas con el turismo y servir como referencia para otros sitios designados por la UNESCO en todo el mundo. Sofía Gutiérrez, Directora Adjunta de Turismo Sostenible de ONU Turismo:
"La experiencia de Machu Picchu como signatario de la Declaración de Glasgow puede ser un referente para otros destinos turísticos del Perú y del mundo. Además de ser un tesoro natural y cultural, Machu Picchu es también un ejemplo inspirador de cómo el crecimiento del turismo y la descarbonización pueden y deben ir de la mano."

Oportunidades emergentes
- Intercambio de conocimientos y desarrollo de capacidades:Ambos destinos pueden beneficiarse del intercambio de conocimientos sobre prácticas de turismo sostenible, medición de la huella de carbono y estrategias eficaces de mitigación. Los talleres conjuntos, los programas de capacitación y las conferencias pueden mejorar la capacidad de los actores locales para implementar y sostener iniciativas de turismo de bajas emisiones.
- Investigación e innovación compartidas:Los proyectos de investigación colaborativa pueden explorar soluciones innovadoras para reducir las emisiones del turismo, como el desarrollo de nuevas tecnologías para la gestión de residuos, la energía renovable y el transporte sostenible. Bonito y Machu Picchu pueden convertirse en centros de innovación en materia de turismo de bajas emisiones si se unen recursos y conocimientos especializados.
- Compromiso y empoderamiento de la comunidad:La participación de las comunidades locales en la acción climática es fundamental para el éxito de las iniciativas de turismo sostenible. Ambos destinos pueden trabajar juntos para empoderar a los residentes mediante la educación, la capacitación y la participación en los procesos de toma de decisiones. Esto garantiza que los beneficios del turismo de bajas emisiones se compartan de manera equitativa y contribuyan al bienestar de las comunidades locales.
- Desarrollo de redes globales: Facilitar la colaboración generalizada y el intercambio de información entre Sitios designados por la UNESCOLa red promoverá la adopción de prácticas de turismo sostenible y estrategias de acción climática, fomentando un esfuerzo colectivo para abordar los desafíos ambientales globales. A través de esta Red Global, los sitios miembros tendrán acceso a una plataforma unificada para intercambiar las mejores prácticas, recursos y soluciones innovadoras, mejorando así su capacidad para impulsar el desarrollo del turismo sostenible a escala global.
Reflexiones finales
Bonito, como Reserva de la Biosfera de la UNESCO, y Machu Picchu, como Sitio de Patrimonio Mundial Mixto de la UNESCO, ambos destinos con emisiones de carbono neutras, pueden proporcionar a la industria del turismo información importante sobre la lucha contra el cambio climático. El fortalecimiento de la colaboración bilateral como ciudades gemelas climáticamente inteligentes tiene el potencial de impulsar un progreso sustancial en la descarbonización del turismo y la promoción del desarrollo sostenible tanto a nivel local como mundial. Al trabajar juntos, pueden inspirar a otros destinos a seguir su ejemplo, creando un efecto dominó que contribuya a un planeta más sostenible y resiliente. De cara al futuro, la asociación entre Bonito y Machu Picchu sirve como testimonio del poder de la colaboración para abordar los desafíos apremiantes del cambio climático. Juntos, están preservando su patrimonio natural y cultural y allanando el camino para una nueva era de turismo de bajas emisiones.
Escrito por Erika Rumiche, A partir de la Green Initiative .